En esta ocasión he tenido sesión para varias fotos:
puesto que tenía pendiente la captura para
Todas las mujeres que soy (todavía no la he publicado),
así que, ya que había montado tinglado en el comedor
y que tenía cámara, trípode y demás, había que aprovechar
cuando mi peque llegará del cole para nuestro 52.
Su cara, nada más verme, sin desperdicio alguno...
Además venía medio llorando porque quería jugar
con el móvil de su padre, nada más llegar a casa,
pero tampoco ayudaba mucho con el fin de ponerse en camino,
vamos... estás cosas de la edad que aunque nos oyen
no nos escuchan y tampoco nos hacen caso...
Pasó del lloro a la risa y a la carcajada en fracciones
de segundo, jajaja. Le pedí que me diera un besito
en la nariz y él gustoso y mimoso, me obsequió con uno
de esos muy, muy dulces.
Corazón de niño, corazón de payasa
Como negarle un besito a alguien que te saca una sonrisa... ;)
ResponderEliminarMuas!
En eso tienes toda la razón Mo... =^D.
EliminarBesotes Guapetona!!!.